Si quieres participar en el blog, envía tu texto a la dirección miytucorreo.escribetutambien@blogger.com , y tras una revisión de alguno de los creadores, aparecerá junto con el resto.

miércoles, 23 de junio de 2010





Acabo de llamar a mi casera, Catalina. Se ha puesto hecha una furia. Le he dicho que me voy del piso, un día antes de firmar el contrato definitivo. Tenía ya todo el dinero de la fianza sacado.

Se ha enfadado, mucho, porque le he avisado demasiado tarde.

La decisión la tomé esta misma mañana, mientras me inventaba teoremas en el examen de Física. Tenía que huir de aquí. No puedo más con estas cuatro paredes.



No sé dónde me quedaré, apenas hay pisos ni habitaciones libres, y las que hay, son poco recomendables. Lo único que sé es que a partir del 1 de agosto no podré volver a pisar la habitación que me vio renacer.


Necesito volver a empezar. Todo el mundo tiene derecho a comenzar de nuevo, una, dos o cincuenta veces. Quizás en alguna acierte.




Ahora me siento realmente mal. Catalina dice que le he decepcionado. Me ha llamado incompetente. He tenido que mentirle contándome una historia sobre mis primos y mis tíos. Me siento realmente mal ahora. No me gusta traicionar a los demás.


Y tengo miedo. Pero al menos estoy haciendo lo que quiero hacer: cambiarlo todo una vez más. Hay que volver a pintar las paredes.


El sintecho.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

¡Manifiéstenseee!