Si quieres participar en el blog, envía tu texto a la dirección miytucorreo.escribetutambien@blogger.com , y tras una revisión de alguno de los creadores, aparecerá junto con el resto.

martes, 29 de diciembre de 2009

El texto sentido: Wistawa Szymborska

"La vida en la tierra sale bastante barata.
Por los sueños, por ejemplo, no se paga ni un céntimo.
Por las ilusiones, sólo cuando se pierden.
Por poseer un cuerpo, se paga con el cuerpo."

("Aquí", W. Szynmborska)

jueves, 24 de diciembre de 2009

Iluso
eres,

David.

miércoles, 23 de diciembre de 2009

Una larga siesta por la tarde, que se prolonga hasta la noche.







Amanecer en mitad de la noche y pasarla en vela.



Comerme un gofre recién hecho, mientras escucho a Antony and the Johnsons.



Y afuera la tormenta lucha contra el cristal. El viento silba y las gotas tamborilean sobre todo.


El cielo se ilumina.


Me siento bien. Por una vez, no tengo nada más que pedir.



No somos felices cuando tenemos todo lo que deseamos. Solo somos felices cuando deseamos las cosas que tenemos. Y yo no necesito más.


David

domingo, 20 de diciembre de 2009

El texto sentido: Rousseau.


 "¿En qué consiste, pues, la sabiduría o la ruta de la verdadera felicidad? Precisamente no está en disminuir nuestros deseos, ya que si estuvieran por debajo de nuestro poder, una parte de nuestras facultades quedaría ociosa, y nosotros no gozaríamos de todo nuestro ser. Esto no consiste en otra cosa que extender nuestras facultades, pues si nuestros deseos se extendieran al mismo tiempo en mayor cantidad, seríamos más infelices. Pero esto es disminuir el exceso de los deseos sobre las facultades y poner en perfecta igualdad el poder y la voluntad. Solamente entonces es cuando todas las fuerzas están en actividad; el ánimo, sin embargo, permanecerá tranquilo, y el hombre disfrutará de un justo equilibrio."

Emilio o la educación. Libro II. Jean-Jacques Rousseau.



Patri.

viernes, 18 de diciembre de 2009

¿Por qué este vacío, esta desazón? ¿Y esta quietud de calmado océano en mitad de la noche?

Oigo constantemente en mi corazón el sonido de la nada. Es un silencio que no me deja pensar. Y que me impide escuchar las verdades que el corazón intenta decirme.

¿Pero por qué?


¿Estamos condenados a esta incertidumbre perenne?


¿Por qué?



Agobia respirar.

lunes, 14 de diciembre de 2009

Consumismo.


  La semana pasada Jo (anarcoguiri girl) me explicó que toda su ropa procedía de restos de stock del mercadillo. Por lo visto, cuando desmontan un mercadillo de esos que levantan en nuestros pueblos una o dos veces en semana, dejan los comerciantes decenas de cajas con aquello que no han vendido y no creen que vayan ya a vender. Las dejan allí tiradas, como si de basura se tratase, en la explanada donde levantaron sus puestos; antes de que vengan los basureros municipales a hacer limpieza, gente como Jo, que no puede gastar su dinero en nada que no sea lo imprescindible, se acerca a buscar en las cajas aquellas prendas que les puedan servir. Jo iba vestida impecablemente y con el estilo juvenil que le caracteriza: pañuelo florido en la cabeza, unos pantalones de esos repletos de bolsillos, una sudadera  roja con un dibujo muy alegre y un chaleco sin mangas encima. "Todo limpio", me dijo, "todo nuevo"; todo desecho del mercadillo. Lo que no quiere la gente... ¿por qué? Tal vez porque no sea de marca, o no esté a la última moda o... qué sé yo.
Me quedé francamente sorprendida. Nos gastamos cientos de euros cada temporada en ropa simplemente porque es la que se lleva ahora, o porque sólo tenemos una docena de jerseys en el armario y de color magenta no? Y se tira ropa, ropa nueva y bonita y abrigada... cuando hay gente que no tiene qué ponerse.
Afortunadamente hay gente como Jo -pocas, pa qué nos vamos a engañar. También me habló la semana pasada del trueque. En Coín se reúnen todas las semanas un grupo cada vez más numeroso de gente que viven la vida de otra manera -porque de otra manera la sienten (¿conocéis esa frase de Bakunin que advierte de que vivas según piensas o terminarás pensando según vives...?). Organizan danzas, talleres, yoga, etc... todo de manera gratuita y también un mercaíllo donde no se usa otra moneda que el trueque. Jo me explicó que ella había hecho un montón de galletas (me trajo una bolsita y estaban buenísimas) y aceite de algunas de las aceitunas que recogieron en la cosecha y que había envasado; las había cambiado por pan casero, por leche y huevos. ¡Qué maravilla!

  ¡¡Señores, una nueva sociedad utópica se está gestando en Coín!! Algunos, guiris y foráneos, le están plantando cara al furor capitalista; humildemente, sin pretensiones, pero con coherencia y una pizca de idealismo. Estoy invitada y tengo ganas de ir pero... ¿qué podría aportar yo?

Patricia


lunes, 7 de diciembre de 2009

De la soledad y otros demonios.

 A veces una necesidad abrumadora de compañía nos invade sin avisar y nos lanzamos a la ventana más próxima gritando "¿¡Hay alguien ahí?! No somos nada exigentes entonces, sólo buscamos una sonrisa, un par de ojos y unas palabras que llenen ese espacio a nuestro alrededor que de repente se nos hizo insoportablemente vacío. Son momentos peligrosos esos. Porque la compañía como la soledad debiera ser siempre escogida, ¿o tal vez no?
La soledad que nos costó lograr, porque tuvimos que apartar con el más terrible de los machetes incluso a la gente que más queremos para conseguirla, es, al igual que la compañía que más dificultad nos planteó conseguir, la que más valoramos y disfrutamos. Pero la otra soledad, aquella que un buen día se abre bajo tus pies y amenaza con tragarte de un bocado para luego escupir tus huesos, esa... esa es tan peligrosa como la mala compañía.
Pienso que lo más astuto es buscar armas para enfrentarla; no huirle nunca; jamás esconderla bajo la alfombra -y llámese alfombra cualquier salida inapetente con los primeros que se terciaron. Enfrentarla contigo mismo. Porque uno es siempre la mejor ayuda; y uno es siempre mucho más fuerte y valiente de lo que creyó en un principio. Creo que ninguna fuerza sorprende tanto como la propia, sí, estoy segura de ello. Tampoco está mal enseñarle a la soledad, como el que no quiere la cosa, un par de amigos que se esconden como ases bajo tu manga; pero no hace falta lanzárselos a la cara, ¿eh?, sólo mostrárselos sutilmente, con serena confianza.
 Pero no soy yo quien para sermonear, que bien sufrí en mis carnes a esta puñetera. No confundir, por cierto, a esta individua con su hermana mutada: la ausencia. Pero eso da para otro capítulo.

Patricia.

sábado, 5 de diciembre de 2009

Otra vez hace frío,

Otra vez estoy en mi pueblo natal.

Otra vez hay tristeza en el hogar.

Otra vez he visto cómo te escondías de mí.

Otra vez me dejé de sentir.

Otra vez me he visto en el espejo,
y pegué una paliza al reflejo.


Otra vez he paseado solo.



Otra vez la sal de mis lágrimas se ha reunido con la del mar.



Otra vez he muerto un poco más.

David

lunes, 30 de noviembre de 2009

Esos maravillosos anarcoguiris...

Hace cosa de un mes Jo me dijo que regresaban. "No work, no money", sentenció llanamente intentando forzar una sonrisa. Eso nunca les había supuesto ningún impedimento, pero ahora ella está embarazada.
Me lo comunicó en español; con su encantador acento me brindó este verano un "Estoy em-ba-ra-za-da"; ¡qué abrazo nos dimos! Tenían mil ilusiones: vender el coche, comprar una autocaravana, irse a vivir a un terreno en Benahavís de otro guiri que no tenía pasta para construir... y criar a su hijo LIBRE, así, con mayúsculas. Yo estaba tan ilusionada como ella, me sentía una privilegiada pudiendo ser testigo de un proyecto tan inmenso, tan grande, tan...
Pero el verano pasó y los turistas se fueron y Alex se quedó sin trabajo y llegó setiembre y Jo vio desaparecer todos sus alumnos particulares (salvo una servidora, claro, que volvió a suspender). Y la noche de un cinco de noviembre los dos se encontraron pasando frío en el coche, y el crío por nacer allí entre ellos, presente, llenando todo con su presencia. Y pensaron que en Inglaterra, en su Inglaterra, aquella era la noche de Guy Fawkes, en la que se celebra el intento de atentado contra las Casas del Parlamento con grandes y alegres hogueras en todos los pueblos... y ellos allí, solos, pasando frío. Y se rindieron.
La madre de Alex les había buscado un trabajo allí en su país, me dijo, y venía a por ellos para llevárselos de vuelta. No pude evitar emocionarme y Jo conmigo. Lo sentía una derrota casi personal, y, sin embargo, era lo único razonable, porque hablábamos de una embarazada y de la crianza posterior de un niño. Así que decidimos que no más clases, que la próxima vez quedaríamos para despedirnos con unas cañas. Así que encargué el libro On the road, de Kerouac como regalo de despedida (sí, ya veis, que me repito en el regalar; en realidad, marco el territorio: ¿tiene un libro dedicado por mí? pues es amigo mío). Y, sin embargo...
La semana pasada nos vimos para esa prometida cerveza en nuestro lugar de siempre: el café del parque. Me sorprendió que Alex no estuviera y aún más cuando me dijo Jo que estaba trabajando en el mercaillo (los miércoles hay uno allí al lado), pero lo que vino después aún me dejó más patidifusa. ¡¡No se iban!! ¡¡Se quedan!! Y lo que viene a continuación, a pesar de lo rocambolesco, os juro que es absolutamente verdadero. Resulta que, en sus clases de yoga en Coín, otros guiris le comentaron que había una pareja británica que tiene un buen terreno de olivos en Alozaina y se dedican a exportar el aceite por diferentes países europeos; les va muy bien, pero están continuamente de viaje, así que necesitan que alguien esté allí todo el año cuidando de sus olivos. Habían pensado en ellos. Les ofrecían un alojamiento muy especial... ¿habéis visto alguna vez esas curiosas tiendas de campañas circulares que tienen los mongoles? Sí, esas enormes blancas, pues en una de esas viven ahora mis queridos anarcoguiris. Tendríais que escuchar a Jo, te la describe como si fuese el Ritz ("¡tiene unas camas muy cómodas!", dice, "y una estufa que lo calienta todo y expulsa el humo al exterior"). Además, han disfrutado intensamente de varear olivos y de catar aceite de oliva... qué par tan genial.
Pero no acaba aquí la cosa, Jo estaba muy contenta porque le han salido cinco alumnos más y tiene el jueves repleto (que es el día que bajan a la costa); necesitan trabajar pensando en el niño que llegará en mayo. Y, sin embargo, a pesar de ello, va Jo y me dice que lo han estado hablando y ¡que no quieren cobrarme las clases! Que yo soy "so lovely" (¡chiquillos, me han dicho muchas cosas, pero lovely jamás!) y que "you're my friend" y que basta con que le pague la tapa de tortilla y el café... Por supuesto, me he negado, pero quiere ahorrar el dinero, entonces, y que nos lo gastemos todo emborrachándonos cuando yo apruebe el inglés, ja, ja, ja.

¡¡Os quiero, anarcoguiris!!

Patri.






domingo, 29 de noviembre de 2009

Mi alma está cansada.

Intentad obviar su... ¿anillo? ¿escudo?.



Who will comfort me - Melody Gardot



My soul is weary and beaten down from all my misery, yeah,




Oh Lord, who will comfort me?
My soul is weary and beaten down from all my misery, yeah,
Oh Lord, who will comfort me?

Got a hold on my heart that keeps me bound when the whole wide world is free, yeah,
Oh Lord, who will comfort me?
Got a hold on my heart that keeps me bound when the whole wide world is free, yeah,
Oh Lord, who will comfort me?

My home is a wreckage, a family drowned in plight and poverty, yeah,
Oh Lord, who will comfort me?
My home is a wreckage, a family drowned in plight and poverty, yeah,
Oh Lord, who will comfort me?
Oh Lord, who will comfort me?
Oh Lord, who will comfort me?

Oh Lord,

who will comfort

me?



David

martes, 24 de noviembre de 2009

No mentían.




En varias ocasiones, durante esas conversaciones pueriles que surgen de la nada, esperando al autobús o en la cola del supermercado, pero de las que se puede aprender bastante; decía: en varios de estos encuentros la sabia casualidad me ha hecho coincidir con otro arquitecto o estudiante de arquitectura en mi Escuela. Y nada más insinuar que soy primerizo en esto de la construcción, la cara del contertulio fortuito se torna en una melancólica mirada de compasión, mientras me cuenta con un tono dulce, pero resentido, que es una carrera bien difícil. Todos ellos, especialmente los que están en últimos cursos, añaden que Arquitectura te consume toda tu vida, que el tiempo libre será un bello y lejano recuerdo de la infancia, que los seres con los que más contacto físico tendrás serán una plantilla de reglas y un lapicero de mina 3H, que los fines de semana pocas veces serán lo que eran antes, sino que alguno que otro te parecerá un oasis en medio del enorme desierto, en el que podrás retomar fuerzas para seguir acarreando pesadas piedras de granito para concluir la cima de la pirámide.

Exageraciones, por supuesto. Esas cosas tan difíciles las podré superar bien. Me lo tomaré con tranquilidad, con filosofía, como se dice. Estudiaré día a día un poquito, y lo llevaré todo bien. Jamás me acostaré tarde, quizás en alguna que otra ocasión en la que me vea forzado a ello... Vale, bueno, esto no se lo cree nadie.

La semana pasada (esto comenzó a escribirse entonces, hasta ahora no he podido finalizar), de Lunes a Viernes, dormí unas 20 horas, de todas las 120 que pasaron. Haciendo mil trabajos diferentes, acostándome hasta las tantas, sufriendo como un condenado las fuerzas atrayentes que me arrastraban a la cama. El miércoles dormí poco más de media hora. Pero lo confieso, tan mal no estaba. Porque el jueves por la noche salí hasta las 5 de la mañana... está visto que la energía es infinita en determinadas circunstancias, pues se sacan fuerzas de donde no hay con tal de desquitarse un poco. Me levanté a las 10 (me salté matemáticas, sí), y esa noche me fui de concierto. Genial Love of Lesbian. Aunque a la vuelta me doliese hasta el alma.

Lo malo es que la semana anterior fue parecida. Demasiado ajetreada para mi gusto, y para el de todos. Nos cuesta mucho seguir el ritmo. Y por lo que parece, esta semana será igual, y la siguiente, y la otra. Para "consolarnos", los profesores nos dicen que el principio es lo más fácil. Que luego en los próximos meses y años ya sí se pone durilla la cosa. ¡Pero qué alegría, eso son profesores de verdad, que motivan a sus alumnos!

Lo bueno es que dicen que a los 5 años, la necesidad de dormir todos los días ya apenas existe, pues puedes aguantar con tres siestas al mes; y que el dedo ha conseguido la forma del hexaedro del lápiz, por lo que es más cómodo que nunca. Incluso a alguno que otro, el pulgar y el índice se les ha convertido en un funcional compás.


David.

domingo, 22 de noviembre de 2009

Eyes full of sorrow, never wet.

Everyone's gone to the moon - Nina Simone



¿La canción? Desgarradora.

¿Y yo? Desgarrado.


David

domingo, 15 de noviembre de 2009

Volviendo atrás.

Hoy volví a tener entre mis manos el precioso reproductor mp4 que hace dos años me comprara por estas fechas. El primer capricho que me pagase con mi propio dinero. 100 euros, por 1 Giga de capacidad, pero un diseño bastante elegante. Lo utilicé nada más que para almacenar música clásica, a mis cantautores preferidos, mis temas más sentimentaloides... en general, toda aquella música que, por una extraña vergüenza por salirse de lo "normal", prefería mantener oculta en un dispositivo que nadie conocía. Para los amigos ya tenía un pequeño iPod, más accesible. Pero cierto día desapareció, y lo eché mucho de menos.

Me acordaba muchas veces de mi querido mp4, el primer objeto realmente mío. Le cojo mucho aprecio a las cosas materiales, lloré más por perder algunos objetos que por la muerte de un familiar cercano.No podría decir por qué. Quizás porque he vivido momentos inolvidables escuchando música con mis cascos, llevando una chaqueta especial o con unas zapatillas determinadas, lo que hace que inevitablemente relacione muchos objetos de mi alrededor con sensaciones pasadas. Este reproductor me acompañó en mis soledades, cuando necesitaba paz, cuando un piano me transmitía todo lo que ninguna voz era capaz de expresar.

Hoy, mientras hacía la cena, me puse a ver las fotos que también tenía almacenadas. Todas eran suyas. En el cristal del baño, con la hermana, con un amigo, de cualquier manera, siempre estaba en todas. Me embargó una extraña sensación, algo en el estómago se truncó. Hizo "click" una pieza en mi engranaje cerebral.

Me he dormido muchas noches viendo las mismas fotos. En momento, eso era lo máximo que podía hacer, una verdadera pena. Sólo besar una pantalla. Ahora, no puedo ni eso. Antes soñaba y soñaba, esperanzado, me ilusionaba, fantaseaba. Ya esos momentos apenas los recuerdo como una anécdota pasada, difusa. No sé si soy yo el que sentía tanto, o simplemente es todo una buena película que vi un domingo por la tarde, de aquellos de invierno, con tres envoltorios de polvorones sobre la mesa, acurrucado en el sofá. El recuerdo es borroso, fangoso. Y los sentimientos, amargamente ajenos. No somos la misma persona que fuimos ayer. El David de hace un año es un desconocido para mí.

Porque ahora me pregunto... ¿Para qué? ¿Para qué todo eso? ¿Para qué sentí tanto, amé, me esforcé, luché, deseé, me sacrifiqué, dí todo lo que tenía? Estaba marcando un hito en mi vida, haciendo mi historia, guiando mi futuro, construyéndome como persona. Mírate al espejo. Has vuelto al punto de partida. Sigues en la oficina de información al turista inocente, sin saber a dónde dirigirte. Ni sabes cómo has llegado a la casilla de salida. ¿Y todos esos pasos andados? ¿Y todas esas esperanzas puestas? ¿Dónde está la energía empleada si, según el principio de la conservación de la energía, siempre perdura, aunque manifestada de otra manera? Nada he recibido a cambio.


Sí, sí, si. Conocimiento, experiencias, sabiduría. En la teoría ya estoy sacando mis mejores notas. ¿Pero de qué sirve estudiarte el código de circulación si no sabes qué pedal pisar con el pie? El conocimiento no lo es todo. Sólo tiene validez la teoría cuando es empleada en la práctica. Entender sin ejecutar es una estupidez. Aprender es un esfuerzo, vano si no se utiliza después. Por ahora acumulo libros, estanterías, bibliotecas repletas de mi conocimiento que nadie se ocupará en leer.


Miro su foto, y aún queda un resquicio, una minúscula resquebrajadura en la cicatriz que deja pasar algunos fotones de todo lo que me había iluminado.


Esta noche, este momento, estas palabras, sólo serán rumores que, entre los rugidos del río, acudirán de vez en cuando a mi memoria en negras ondulaciones de una nostalgia repulsiva.

David.

sábado, 14 de noviembre de 2009

Eso del sentido...

  Y si estamos en este universo increíble por puro azar -que lo estamos-, por una curiosa carambola, pero, al mismo tiempo, todo en los organismos vivos funciona con un fin, con un objetivo, ¿qué función tiene en nosotros este continuo devanarse los sesos, este incontrolable cuestionamiento de todo, este martilleo del porqué (este darle vueltas a la cabeza, que lo llama un amigo mío)? ¿Será acaso que somos nosotros una remesa defectuosa? ¿seremos aquellos humanos que nacieron con una tara -oséase, tarados- consistente en dedicarle tiempo y sufrimiento a una actividad del todo inútil? Y, si es así, ¿terminaremos desapareciendo entonces poco a poco, en cada generación, ya que la selección  natural siempre deja atrás a aquellos organismos que nacieron lisiados? Es decir, caminaríamos entonces hacia una generación futura donde sólo existirían los seres humanos sanos: los ortodoxos.

Patri.

miércoles, 11 de noviembre de 2009





Hoy es uno de esos días buenos, y hay que aprovecharlo.

David

martes, 10 de noviembre de 2009

Momento friki.

Para empezar, este reloj tan original que he encontrado de casualidad en eBay.



Es el SEILF EMIT, que como podéis comprobar, da la vuelta a toda la concepción del tiempo.

Y para poner punto final a esta extensa muestra de ejemplos realmente frikis, el spray maravilloso que todos andábamos esperando. Un invento revolucionario que satisface una de nuestras necesidades más vitales. Pero ahora os tocará practicar el inglés, porque he copiado directamente el texto de una de las mejores páginas que existen en la red, donde muchas personas se sentirán reflejadas, www.stupid.com. ¡No es ni más ni menos que el maravilloso "Gay Accent Spray", que al fin nos permite hablar con ese toque gay tan deseado!




"You may laugh, but there are times when speaking with a gay accent has its advantages. For instance, did you ever wonder why your haircuts leave you looking like Shemp of the 3 Stooges? If you had spoken with a gay accent, we can almost guarantee you'd end up looking like Brad Pitt. 


Or ladies.... Perhaps you don't want every other girl at the party hitting on your man? Just give him a spray of Instant Gay Accent, and no other gal will try to pick him up. (But they may ask him to decorate their apartment.)
We can go on and on about this product (and probably offend the entire world in the process), but we'll stop right here. It's real funny, has a delicious peppermint flavor, and a tasteful package (pink, of course)."


(Aclaración: the 3 Stooges son Los tres chiflados, siendo Shemp uno de ellos).


Yo ya tengo el mío! ¡Reserva el tuyo cuanto antes, y de regalo, recibe en tu casa totalmente gratis el Spray para entender el Arte Moderno!



Dios... ¿pero por qué pierdo tanto el tiempo?



David.


Ya me estoy cansando de aquella vieja historia.



Pero sé que el mundo no parará por mucho que grite.







¿Alguien sabe cómo reiniciar el sistema?
Hubo colapso en la red.




¿Quién va a ser si no es el mismo de siempre?

jueves, 29 de octubre de 2009

Damero

 BlancoNegroBlancoNegroBlancoNegroBlanco
 NegroBlancoNegroBlancoNegroBlancoNegro
 BlancoNegroBlancoNegroBlancoNegroBlanco


Estos días son como un código de barras.


Y me cuesta luchar contra las mareas, tan caprichosas, que me pillan de imprevisto.


Patricia, tú sabes a qué me refiero.




David.

lunes, 26 de octubre de 2009

Decepciones infantiles.

  Mi primera gran decepción fue el circo. Tenía ocho o nueve años la primera vez que me llevaron. Ya para entonces yo había leído más de un libro sobre el circo, de hecho uno de aquellos con los que aprendí a leer se llamaba así "El Circo". Para mí la palabra circo poseía unas maravillosas connotaciones mágicas y maravillosas; seres libres y hermosos erraban de un pueblo a otro para ofrecer a sus hechizados habitantes el increíble mundo del circo. Total que un solariego día mi madre nos llevó al circo. Fue patético.
  Aquello olía fatal; a animales, a mierda, a sudor, qué sé yo... el hedor era francamente desagradable. Era un circo diminuto, sólo tenía una pista y enana; me daba la impresión de que la lona se iba a derrumbar sobre nuestras cabezas en cualquier momento de lo bajita que estaba. Y luego el espectáculo... animales famélicos llenos de moscas, payasos sin gracia alguna (y mira que es fácil hacerme reír a mí, joder), equilibristas nada exóticas y ¡ausencia de trapecistas, por dios! Para colmo de males, cuando nos levantamos para irnos mi madre, que al parecer se había sentado sobre un chicle, se trajo consigo el listón de la grada pegado al culo... No he vuelto a pisar un circo.

Luego fueron los Reyes Magos. Mi padre se dirigió a mí con seriedad un caluroso día de verano y me invitó a dar un paseo: "Tenemos que hablar, Triki". ¿El problema? A los diez años seguía creyendo en los Reyes Magos sin sombra de duda; de hecho, mi creencia era tan férrea que -esto no es broma- ¡había conseguido convencer a la mayoría de mi clase de que si a ellos no les regalaban los Reyes sino sus padres era culpa suya! Los convencí de tal manera que me habían hecho encargos para ese año; pensaban que si yo les escribía en mis cartas a los RRMM sobre ellos y sus peticiones, tal vez conseguirían obtener los regalos que realmente deseaban y no las camisas y los pantalones que les ponían sus padres en los últimos años (el cole estaba en un barrio muy pobre de un pueblo sevillano). Fue duro reconocer ante ellos que yo había estado engañándome todos esos años. Cuando mi padre me lo soltó no pude evitar derramar gruesos lagrimones. ¿Quién sabe? Tal vez fue esa decepción con la monarquía la que hizo que hoy sea republicana :-)

"El poeta es un fingidor.
 Finge tan completamente
 que hasta finge que es dolor
 el dolor que de veras siente".

(F. Pessoa)


Patricia

domingo, 25 de octubre de 2009

Hoy paseo solitario. Éste y el post anterior los estoy escribiendo en el primer ciber que he encontrado. 80 céntimos me ha cobrado por 25 minutos... no tenía más dinero. Los otros dos euros que tenía, se los he dado a un hombre en la calle.

Andaba paseando, solo, porque no tengo compañía en una noche como ésta, de sábado, en mi ciudad. Tampoco me he preocupado de buscarla, no quería encontrarla. Ya no me siento bien con nadie, y quiero sentirme a mí un poco más.

Vagando entre las calles, escuché música. Un hombre de aspecto indescriptible andaba cabizbajo tocando su guitarra acústica con habilidad inaudita. Sí era audible su voz, alta y clara, cantando en inglés. Otra vez el inglés, que me volvió a aquellos dos recuerdos. Ese hombre que deambulaba rasgando su guitarra y sintiendo su canción no sospecha que me ha alegrado la noche, al menos durante una media hora. "Thanks, my friend" al entregarle dos euros. Más le habría dado, pero con más monedas sentía que me quedaba corto. La gratitud que le tengo a un desconocido simplemente por hacer música en la calle, por entretenerme y hacerme sentir bien con su voz, esa gratitud no es fácilmente financiable, remunerable. No se le puede devolver de ninguna manera.


Acaba ya mismo el tiempo. Me he sentido bien escribiendo. Me escuecen los ojos, por el calor del ciber. Gente muy extraña se reune aquí. ¿Serán también bloggeros anónimos, que necesitan en una noche desesperada vomitar su códigos binarios?

Ahora, a seguir caminando. Quizás me encuentre a alguien especial. No me vendría mal conversar.

David

Pequeños momentos en mi ciudad natal.

Estoy en Fuengirola. Dejé Sevilla tras dos horas de viaje, un tren perdido y 15 euros malgastados. Justo hoy me dijo mi enigmática vecina que el que pierde el tren, nunca lo llega a coger, y por ello no llegará a su destino. Me ha dado miedo, ya que lo he aplicado a mi caso, pero supongo que tiene razón.

Anoche no tenía nada que hacer. Visité a unas amigas a casa de una de ellas, y recordé viejos tiempos a su lado. La conozco desde preescolar... podría decir que es la única persona que siempre ha estado a mi lado... pero sería mentira. Después del colegio, nos dejamos de hablar al distanciarnos, y por casualidades del destino, el verano pasado nos volvimos a reencontrar. Ahora somos inseparables. Son radicalmente distintas a mí, pero con poquísimas personas me siento mejor que con ellas. Tienen una forma de vivir tan agradable que hace sentir que nada puede ir mal, y si va, que se arreglará de la mejor manera.

Después de despedirme de ellas, me fui con mi moto. A dar mis clásicos largos paseos, de punta a punta del paseo marítimo, desde mi querido castillo hasta mi añorada roca, en torreblanca, donde ya el pavimento desaparece y la playa anuncia su pronto fin. Conduje por calles que nunca había pasado. Visité la acojedora guardería donde había pasado mis primeros años: pocos recuerdos perduran, pero en la mayoría, he de destacar que yo era el malo. Por lo visto era un pequeño diablillo. Acosaba a los demás... y ya ven. Algo pasó para que se cambiasen las tornas, y ahora sea yo el débil que recibe, incapaz de rebelarse. Pero tanto como yo he cambiado, ha cambiado la pequeña escuela. Abandonada, la maleza le ha ido ganando el terreno al suelo, las paredes se han tatuado de grietas, las ventanas han desaparecido y los colores han enmudecido. Quedan restos de algún asentamiento okupa, y algún que otro graffiti inconformista. Pero de la puerta cerrada con candado no pude pasar.


Luego de la desolada visión y de los intensos recuerdos, me dirigí a mi colegio. Salté la valla con facilidad, sin remordimiento y confiado, sintiéndome en mi casa. Aquella valla de gigantes infranqueable cuando era un renacuajo. Anoche paseé una media hora por entre los patios, bajo las columnas, a la sombra de los árboles. Me tumé en el suelo y contemplé las estrellas. Me refugié en mi rincón preferido. Lloré. Mi querido colegio Sohail. Mi odiado colegio Sohail. Los peores momentos viví allí, pero también las mejores cosas sentí. El primer amigo, que se fue al poco tiempo, y que jamás pudo ser reemplazado. Ahora vive en Inglaterra, estudiando arquitectura, con camisetas de DC y Volkom, y una novia rubia de sonrisa azulada. También el primer amor correspondido... una chica preciosa, de pelo dorado y ojos marinos, con un bello acento inglés. Y minutos despúés de la mágica declaración de amor eterno, el jarro de agua fría: esa misma tarde partía para Gran Bretaña. Ahora que lo pienso, puede que esas dos personas estén juntas. Casualidades más extrañas de tan dispares elementos se han conjugado.

Subí de nuevo sobre el muro, y volví en mi negra avispa a la playa. Volví a sentarme en el borde del paseo marítimo, a contemplar el mar, a oir cómo las olas rompían, inocentes, ajenas a todo.

Anoche viví intensamente la vida que me había tocado. Y no conseguí acostarme con una sonrisa en los labios.


David

viernes, 23 de octubre de 2009

La banda sonora de mi vida: Eleanor McEvoy

  Hace unos días, después de cientos de años, los primeros versos y acordes de "Only a woman's heart" regresaron a mis entrañas. Fue curioso, porque hacía años que no recordaba aquella canción. Cuando Eleanor McEvoy lanzó su single en España, yo tenía dieciocho años recién cumplidos y estaba terminando bachillerato. Hoy, al volver a escucharla en youtube, me ha sorprendido el pensar que a mí entonces me calara tanto esa canción, porque eso significa que ya sabía lo que era sentirse de esa manera a pesar de que, ahora sé, que no intuía ni por asomo cómo puede llegar a inundarse de desolación, de desánimo, de tristeza,  el corazón de una mujer. Recuerdo con una sonrisa que discutí una noche acaloradamente con el chico que me gustaba en aquellos momentos sobre esta canción  con un vodka con menta en la mano (¡¡dioos, ¿cómo he podido beber cosas tan cursis?!!) y una de esas enoormes y coloridas camisas ochenteras; él decía que la letra le ofendía, porque los hombres también pueden sentir su corazón así, al mismo nivel que las mujeres, yo intentaba hacerle ver que no, que no era lo mismo, que no era a eso a lo que se refería la cantautora, pero no encontraba argumentos, sólo intuiciones. Hoy sigo sin tener argumentos, sólo estoy cargada de experiencias y sentimientos pasados y presentes que no tenía entonces; no sé cómo se siente un hombre que ha perdido a alguien especial y nunca podré saberlo ni compararlo con el corazón de una mujer, pero, como hace dieciseis años, sigo intuyendo en mis entrañas que Eleanor sabía muy bien lo que decía. Hoy, además, descubro nuevos matices en aquella canción, nuevos versos que me sobrecogen y en los que no reparé entonces.

He escogido este vídeo de youtube y no otros "más serios", no por los subtítulos (como habrá pensado el malvado David), sino porque yo ví ese programa la noche en que lo emitieron y lo he recordado con nitidez todos estos años: los subtítulos cuasierróneos, la chaqueta vaquera gigantesca de ella y el flequillo en los ojos, sus pendientes... Ha resultado muy extraño encontrármelo tal cual aquí, hoy, ahora. [Por cierto, David, como no me vuelvas a mandar un mail para dummies indicándome pasito a pasito lo de colgar vídeos voy a seguir dándote trabajo :-(; a ver si éste es el último que tienes que retocarme. ]




Patricia.


My heart is low, My heart is so low

As only a woman's heart can be
As only a woman, as only a woman's
As only a woman's heart can know

The tears that drip from my bewildered eyes
Taste of bittersweet romance
You're still in my hopes
You're still on my mind oh
And even though I manage on my own


My heart is low, My heart is so low
As only a woman's heart can be
As only a woman, only a woman's
As only a woman's heart can know


When restless eyes reveal my troubled soul
And memories flood my weary heart
I mourn for my dreams
I mourn for my wasted love
And while I know that I'll survive alone


My heart is low, My heart is so low
As only a woman's heart can be
As only a woman, only a woman's
As only a woman's heart can know



(Letra: Eleanor McEvoy. Subrayado: mío)

miércoles, 21 de octubre de 2009

Buddy Holly- Oh, boy!






(Tranqui Patri, que la traducción es fácil :P)


All my love, all of my kissin',
you don't know what you've been a-missin',
oh boy (oh boy)
when you're with me,
oh boy (oh boy)
the world can see that you were meant for me.


All my life, i've been a-waitin'
tonight there'll be no hesitatin'
oh boy (oh boy)
when you're with me,
oh boy (oh boy)
the world can see that you were meant for me.


Stars appear, and the shadows are fallin',
you can hear my heart a-callin',
a little bit of lovin' makes everything a-right,
and now i'm gonna see my baby tonight.


All my love, all of my kissin',
you don't know what you've been a-missin',
oh boy (oh boy)
when you're with me,
oh boy (oh boy)
the world can see that you were meant for me.




All my love, all of my kissin',
you don't know what you've been a-missin',
oh boy (oh boy)
when you're with me,
oh boy (oh boy)
the world can see that you were meant for me.


All my life, i've been a-waitin'
tonight there'll be no hesitatin'
oh boy (oh boy)
when you're with me,
oh boy (oh boy)
the world can see that you were meant for me.


Stars appear, and the shadows are fallin',
you can hear my heart a-callin',
a little bit of lovin' makes everything a-right,
and now i'm gonna see my baby tonight.


All my love, all of my kissin',
you don't know what you've been a-missin',
oh boy (oh boy)
when you're with me,
oh boy (oh boy)
the world can see that you were meant for me.







Yeahhhh, he rules!!


David

martes, 20 de octubre de 2009

Minireflexión repentina

(A veces tengo ganas de ser mayor, anciano y experimentado, para ser realmente consciente de todo. Liberarme de la subjetividad por la lejanía eterna del pasado, y comprender la totalidad de lo que fui, de lo que soy.)

(Pero en la mayoría, prefiero descubrir por mí mismo qué pasos soy capaz de dar, y a dónde podrán llevarme.)

David

Gente que despide, que recibe a gente.

Iba a hablar de un tema que llevaba tiempo queriendo tratar, pero me ha venido a la memoria una bellísima canción de Presuntos Implicados, con la delicada voz de Sole Giménez.




Y la letra es bastante apropiada para mí...


Pero sobre lo que yo quería explayarme era precisamente de eso, de la gente que va y que viene por mi vida. Varias personas de las seis millones y pico que habitan este planeta, han sido en diferentes ocasiones el centro de mi atención y de mis pensamientos. Muchas pasan fugaces, y apenas requieren breves instantes, pero otras se quedan para siempre ahí, pasando a formar parte de mi mundo conocido. Algunas me aportan mucho, otras me dan alegría, otras tristeza y dolor, muchas me dan diversión, y otras no me ofrecen nada, pero simplemente ahí están. Se ha dado la casualidad inmensa de que nos hayamos reunido en un determinado entorno en este ancho y largo planeta, por lo que ya por eso merecen pertenecer a mi memoria.

Hoy he chateado con cierto chico del que hacía años (y es cierto, años enteros) que no sabía nada. El que una vez lo significase todo para mí, ahora no sabía dónde vivía. Le guardé odio mucho tiempo, por una historia interminable imposible de contar. No se puede plasmar lo que se siente, ya que las palabras, por muchas que use, no podrán expresar con precisa exactitud todas las situaciones, las circunstancias, los sentimientos, las sensaciones, los deseos, o las lágrimas, aspectos de una realidad única que no se podrá traspasar. Pero lo que sí ha de quedar claro es que este individuo era un gran hijo de puta. Aún así, el tiempo lo acaba curando todo. En su momento parece irrealizable, por supuesto... como egocéntricas víctimas, creemos que sufrimos el peor de los tormentos, y que nuestra suerte es siempre la más injusta. Con el paso del tiempo, comprendemos que somos unos extremistas profesionales y que peores cosas quedan por venir. Así que hoy le perdoné. He conseguido que 20 meses (no exagero en nada, fueron exactamente 20 meses) se esfumaran con un simple "¡Hola!". He tardado el mismo tiempo en superarlo que en sufrirlo, pero lo he logrado. Me he reconciliado conmigo mismo, ya que con él apenas tengo nada que perdonar. Me he pedido perdón a mí mismo por todo lo que, producto de su efecto, he sentido hacia mi persona.  Me he maltratado, destrozado a mí mismo, infravalorado, menospreciado. Más que con él, me he perdonado a mí. He logrado obviar una etapa de mi vida que me había hecho ser de cierta manera, como sabéis, tan autodestructivo, atañéndome siempre con los peores adjetivos y haciéndome responsable de las más dañinas causas. Ahora todas esas razones para el exterminio propio han desaparecido. Hay otras, por supuesto, que siempre estarán ahí, pero las principales ya se fueron arrastradas por la marea. Un gran peso me he quitado de encima. Fue una breve conversación de cosas banales, pero supuso un acuerdo conmigo mismo que jamás romperé. Él está olvidado, lo que sufrí, también, las consecuencias, mitigadas... ahora sólo queda recordar por siempre lo que he aprendido de todo ello.

Pero por otro lado, aquellas personas a las que se decide quitar relevancia, son sustituidas por muchas otras que, inesperadas, aparecen ante ti cobrando un papel que no pensabas que asignarías en mucho tiempo.

He conocido a una chica magnífica, de éstas que no pasan desapercibidas, al menos para mi ojo, entrenado en buscar las excepciones encubiertas, los tesoros escondidos entre los profundos mares de multitudes. La descubrí de casualidad, por cosas del destino, pero al primer vistazo supe que era especial. Ahora somos inseparables, nos vemos en cada intercambio de clase (ella está en otro grupo). Hablamos de muchísimas cosas... le cuento bastante de mí, y poco a poco le voy dejando ver mi forma de pensar, porque sé que ella tiene muchas cosas que decir. Podría decir que es mi única amiga de verdad aquí en Sevilla, así como pienso que no tiene mejor relación con nadie que conmigo. Hemos quedado varias veces fuera de las clases, y la relación es magnífica. Me siento bastante reflejado en ella, quizás por eso va significando cada vez más para mí. Sin duda, es una de esas personas que jamás se olvidarán. Que tengan mayor o menos importancia en este o en otro momento de mi vida, pues sí, como todas las que han pasado... Las personas van y vienen, pero siempre están. Ella, como ciertas otras personas, aunque se vayan, estarán en mí, formando parte de todo lo bueno que soy. Con ellas, me siento yo de verdad: fuerte, confiado, seguro, rápido, sincero, lúcido, bueno. Todo lo contrario que en el caso anterior.


Pero sigo pensando en esos 6 mil millones. En 6 mil millones de personalidades, todas totalmente distintas. A saber cuántas me quedan por conocer en mi corta vida. Quizás me quede lo mejor, que esté por llegar. Y quizás no encuentre nada tan bueno como lo que he tenido ya.

David

domingo, 18 de octubre de 2009

El chico del tejado.

A Sami, que me regaló, sin proponérselo, esta imagen tan hermosa.

 El chico sube al tejado con los gestos suaves y marcados de alguien que ha convertido ese ascenso casi en una rutina. Le sigue de inmediato una gata que se enrosca junto a sus pies cuando éste se acomoda en el lugar de siempre. Enciende un cigarrillo y abarca sus rodillas con los brazos. Su mirada emprende viaje: del pueblo a la montaña, de la montaña al mar; se queda prendida de la línea del horizonte. Esa costura infinita entre mar y cielo. Tras ella él siente el pálpito lejano de una gente que aún no conoce, pero que siente suya; de un lugar que jamás pisó pero que le espera anhelando ser hollado por sus pies. El chico se aparta varios mechones rebeldes de la cara con gesto automático y la bruma que baila habitualmente en sus pupilas parece haberse disipado unos instantes. "No hace falta ser ingeniero para ayudar a que este mundo sea un lugar mejor", se dice, "Sólo tener fuego en el corazón y unas manos grandes", y aspira con fuerza el soplo de brisa marina que a duras penas ha conseguido subir hasta allí. "Pero mientras tanto...", apaga el cigarrillo sin consumir y se levanta con decision para iniciar el descenso. La gata no le sigue; se ha quedado dormida y, en sus sueños, tiembla.

Patricia

jueves, 15 de octubre de 2009

La banda sonora de mi vida: "Contigo"

Ya sé que esta canción es archiconocida, ya sé que no se la descubriré a nadie, pero ¿por qué no escucharla una vez (o mil) más? Para mí es muy especial porque me ha costado hacerla, sentirla mía, batacazos gordos, ríos de lágrimas, tardes de felicidad y noches de desorientación, algún viaje en solitario, varias decenas de libros, mil páginas emborronadas y un hijo. Poder escucharla y sonreír orgullosa es un gustazo que me he ganado a pulso.
Patricia.
P.D. David, quillo, que no hay manera de que yo meta el enlace de youtube en condiciones; ¿me echas una mano otra vez? Te debo una (bueno, más de una :-P)






Yo no quiero un amor civilizado,
con recibos y escena del sofá;
yo no quiero que viajes al pasado
y vuelvas del mercado
con ganas de llorar.
Yo no quiero vecinas con pucheros;
yo no quiero sembrar ni compartir;
yo no quiero catorce de febrero
ni cumpleaños feliz.
Yo no quiero cargar con tus maletas;
yo no quiero que elijas mi champú;
yo no quiero mudarme de planeta,
cortarme la coleta,
brindar a tu salud.
Yo no quiero domingos por la tarde;
yo no quiero columpio en el jardin;
lo que yo quiero, corazón cobarde,
es que mueras por mí.
Y morirme contigo si te matas
y matarme contigo si te mueres
porque el amor cuando no muere mata
porque amores que matan nunca mueren.
Yo no quiero juntar para mañana,
no me pidas llegar a fin de mes;
yo no quiero comerme una manzana
dos veces por semana
sin ganas de comer.
Yo no quiero calor de invernadero;
yo no quiero besar tu cicatriz;
yo no quiero París con aguacero
ni Venecia sin ti.
No me esperes a las doce en el juzgado;
no me digas “volvamos a empezar”;
yo no quiero ni libre ni ocupado,
ni carne ni pecado,
ni orgullo ni piedad.
Yo no quiero saber por qué lo hiciste;
yo no quiero contigo ni sin ti;
lo que yo quiero, muchacha de ojos tristes,
es que mueras por mí.
Y morirme contigo si te matas
y matarme contigo si te mueres
porque el amor cuando no muere mata
porque amores que matan nunca mueren.

Joaquín Sabina

lunes, 12 de octubre de 2009




Es ésta una etapa extraña de mi vida. He dejado muchas cosas atrás, pero otras nuevas voy a recoger. He perdido una gran parte de mí, que me definía, que formaba mi esencia, mi personalidad, mi forma de ser. Pero por otro lado, estoy encontrando otras características que pasan a formar parte de mí, que me modifican y me crean de nuevo.

He perdido a varias personas muy muy importantes para mí. Los fantasmas del pasado a veces vienen a buscarme desde cualquier lugar en el que una vez yacieron, y en otras ocasiones es mi mente débil la que los llama. Pero estoy siendo sorprendentemente fuerte, un Sansón de las emociones. Y como sabéis, la naturaleza de mi fuerza suprema reside en mi pelo. Si se me rapase al cero, volvería a caer en la desgracia. Es decir, a tener mala suerte. Mi peor enemiga (aparte de mí), ya que a ella no la puedo controlar, pues no depende de mí. Necesito que me crezca el pelo otra vez, de una forma lenta, cuidada. Recubrir todo mi cuero cabelludo, y cuidarlo al máximo. Disfrutar un pelo sano, fuerte y brillante (con Pantene).

Por ahora, puedo ver que despuntan los primeros pelos. La fortuna está a mi favor por primera vez en mi vida. Ya era hora. Sí, ya era hora, lo puedo decir con total convicción. He perdido algunas cosas muy importantes, es verdad, pero estoy ganando otras totalmente nuevas, y no menos necesarias. Tantos largos años deseando ser feliz, y ahora que, con la nueva vida que me toca empezar, se me ofrece esta oportunidad de renovación, sé que he de aprovecharla. Es momento de disfrutar cosas nuevas, experimentar, descubrir, probar. Y dejarse de tonterías, y atreverse a ser feliz.

Lamentablemente, muchas veces no nos damos cuenta de lo fácil que puede ser todo. Es simple disposición del ánimo. Que sí, que lo que pase a tu alrededor influye mucho, por supuesto. Pero si no nos impulsamos, si no sentimos deseos verdaderos de conseguirlo, nos podemos perder muchas más cosas que están ahí, a nuestro alrededor, y no vemos. Bien es sabido que aquello que más anhelas, no suele proporcionarte la felicidad que esperabas una vez que lo has conseguido. Se llega a la decepción, entonces, como había comentado antes con Patricia.

Siempre aquello que más feliz nos hace, es lo inesperado. Los que nos pilla por sorpresa.

David

jueves, 8 de octubre de 2009

Soliloquio con una cerveza de más.

Aborrezco los prejuicios, la hipocresía, los dobleces, la mirada ladina, el acomodarse y aburguesarse, la cobardía que no el miedo, los rencores sin fundamento, los recovecos oscuros del ser humano en suma.

Hace no muchos años (o tal vez muchos, según el que los cuente) soñé con un mundo sincero, con gente sincera. Pensé que no era tan malo, ni tan difícil, sólo teníamos que decir aquello que sentíamos o que pensábamos sin más, y, si todo el mundo lo hacía, terminaríamos por aceptar que cosas que nos parecen terribles, aborrecibles o despreciables, son simplemente características de nuestra humanidad. Así que, decidí ser sincera, ¡toma ya! Hace muchos, muchos años (o tal vez pocos, según el que los cuente).
Con la sinceridad unos pocos se acercaron a mí, y unos muchos se alejaron de mí. Así que calibré ¿unos pocos o unos muchos? Al principio opté, como es lógico, por unos pocos; pero resultó que estos pocos, que admiraban mi sinceridad, no creían necesariamente en la suya; de este modo, descubrí a otro grupo: el de los cínicos, ¡qué alegría, ¿no?! Total, que, al final, me hastié de los pocos y de los muchos y los mandé todos a la mierda y me dije: "¡¡Pues voy a hacer lo que me plasca!!" Y lo hice. Y fue muy duro aquello, oye (pausa para apurar mi botellín), pero al menos tuve los cojones (u ovarios) de hacerlo. Saqué mucho, pero fue agotador, y me dí unos años de tregua; pocos, eso sí, que años los tenemos contados, y no podemos ir dejándolos pasar en aburridas etapas de transición. Luego volví a la carga, aunque controlando un poco, pa no complicarme en exceso, yo y los otros. Total, que ahora estoy algo cansá, pero al menos, no me siento tan a disgusto conmigo misma como me sentí ayer (o tal vez hace un siglo, o quizás sólo un par de años), porque lo que sí aprendí fue una cosa: la gente va y viene, algunos permanecen y son un regalazo, oye, qué maravilla, cuando siguen ahí, sonriéndote o llorando contigo, pero sólo uno está veinticuatro horas al día contigo... ¡¡veinticuatro nocturnas y diurnas!! Tú mismo. Y cuando por fin te encuentras y te saludas: ¡hola qué tal borrachuza cervecera, te conozco ¿eh?, sé de lo que huyes y casi lo que deseas!, cuando miras a tu propio abismo y él va y te devuelve una sonrisa... quillo, eso no tiene nombre, eso es un gustazo que hay que currarse día a día, mes a mes, siglo a siglo.

En fin, Old Gold, bonito nombre para una cerveza sueca. La venden en Ikea. Ayuda a escribir estas cosas. No sé si releerlo, porque tal vez descubra que nada he dicho, pero, bueno, al menos quedará ese regustillo extraño de aquellos monólogos surrealistas de Robles, aquellos que leíamos enmarañándonos la cabeza, pero la sensación que nos dejaban era indiscutible. A tu salud, Robles, esté donde estés, y a la de David, por supuesto, que está hecho de madera de saúco, como Andersen, y a Sami, el de Inescrutable Mirada...

Patri.

martes, 6 de octubre de 2009

A veces nos olvidamos incluso de lo más básico.






I got life,
 I got my freedom and my heart
I got my life


David

jueves, 1 de octubre de 2009

La banda sonora de mi vida: Silvio.

 Ahora que David y yo nos quedamos a solas en la construcción de este blog, puedo permitirme colgar aquí algo que me apetecía desde hace mucho tiempo y que no mostré antes en deferencia hacia aquellos que abominan de los cantautores: la poesía de Silvio. Descubrí a Silvio tarde, a punto de cumplir los treinta, pero fue una auténtica revelación para mí, que tanto me había ido apartando de la música en los últimos años. Hoy es, sin duda, mi cantante favorito, y pude disfrutar no hace mucho de su presencia y su voz en vivo en un concierto granaino donde el público -mayoritariamente universitario- le entregó su alma y su calor, como jamás había visto antes en ningún otro concierto.
No puedo elegir canciones. Me gustan tantas... Para una generación muy marcada políticamente, Silvio fue el que cantó al compromiso, contra el imperialismo capitalista y el fascismo; para mí, que lo descubrí varias décadas después de ese momento, se convirtió en el poeta del Amor, de la Pasión, de la Vida. No obstante, me gustan algunas de sus canciones comprometidas, verso a verso, como "Playa Girón" o "El necio" o "Sueño con serpientes". De amor, tantas... "Ojalá", "Te doy una canción". Alguna, como "Rabo de nube", la he convertido en canción de cuna para mi peque. ¡Qué sé yo!
Pero entre todas opté por "De la ausencia y de ti" porque, como ya te comenté no hace mucho, David, el otoño me trajo una nubecilla de ausencia, y ésta me parece una canción no sólo a la memoria de la persona amada, sino de todo un momento, un lugar, una vida...

Eso sí, ¡qué dificil, chiquillo, esto de insertar el video! ¡Han quitado el iconillo para meter el vídeo y sólo he podido colar el enlace! Si tú te ves capaz de modificar la entrada y hacerlo bien, te lo agradecería, niño. En fin, ahí va.



¡Ah! Y la letra:

Ahora sólo me queda buscarme de amante
la respiración.
No mirar a los mapas, seguir en mí mismo,
no andar ciertas calles,
olvidar que fue mío una vez cierto libro.
O hacer la canción.
Y decirte que todo esta igual:
la ciudad, los amigos y el mar,
esperando por ti,
esperando por ti.

Sigo yendo a Teté semana por semana
¿te acuerdas de allá?
Hoy habló de fusiles despidiendo muertos.
Yo sé que ella me ama,
es por eso tal vez que te siento en su sala,
aunque ahora no estás.
Y se siente en la conversación,
o será que tengo la impresión,
de la ausencia y de ti,
de la ausencia y de ti.

No quisiera un fracaso en el sabio delito
que es recordar.
Ni en el inevitable defecto que es
la nostalgia de cosas
pequeñas y tontas como en el tumulto
pisarte los pies.
Y reír y reír y reír,
madrugadas sin ir a dormir,
sí, es distinto sin ti.
Muy distinto sin ti.

Las ideas son balas hoy día y no puedo
usar flores por ti.
Hoy quisiera ser viejo y muy sabio y poderte
decir lo que aquí no he podido decirte,
hablar como un árbol
con mi sombra hacia ti.
Como un libro salvado del mar,
como un muerto que aprende a besar,
para ti, para ti,
para ti, para ti.

martes, 29 de septiembre de 2009

Un monólogo egocéntrico-sentimentalista.





No he hecho nada en toda la tarde... Me siento irremediablemente culpable, sabiendo que podría haber aprovechado más el tiempo, emplearlo en una tarea más productiva que simplemente chatear por el msn, ver vídeos en internet, o leer. Eso sí, he estado un rato leyendo Los sufrimientos del joven Werther, y eso no lo veo del todo improductivo. Pero a parte de eso, nada más. No he salido a conocer mejor la nueva ciudad en la que resido, tampoco he revisado los apuntes de esta mañana, ni he limpiado a fondo mi cuarto, o he organizado la ropa, ni siquiera he tocado un poco la guitarra.


Es horrible la sensación que se te queda en el cuerpo después de haber malgastado el preciado tiempo que se nos ha dado. Una tarde es una tarde, sí, solo eso, en la inmensidad de tardes que habrá en mi vida. O quizás no tantas. Debí haber empleado mejor el tiempo. ¿O no?

Al fin y al cabo, no he salido a conocer la ciudad porque hace un día terriblemente triste. Antes, me gustaban los días grises, los apagados, en los que el sol poco salía entre las nubes, y el ambiente se llenaba de ese olor a lluvia, a tormenta, a tierra mojada, a oxígeno. Sin duda, se respiran mejor esos días, y me siento bien entonces. Quizás porque esa tétrica atmósfera se reflejaba con mi estado de ánimo. Soy una persona melancólica que sólo se siente a gusto en un entorno melancólico. Pero por lo visto, algo ha cambiado. Hoy el cielo se ha sepultado sobre las nubes, como también mi cabeza parece haber sido presionada por el gas. Respiro mejor, sí, pero no siento el sol en mi piel. Llevo dos días sin apreciar su calor, y me parecen un mes. Ahora me parece tan necesario, tan vital... No entiendo el por qué de este cambio. Quizás no se deba a nada en especial. Quizás sea porque sí, porque el cambio se había de dar.

Estoy a gusto, donde estoy. Por primera vez en mi vida, y en la circunstancia que menos imaginé. Totalmente solo, aislado del mundo. Viviendo con dos chicos prácticamente desconocidos con los que hay un contacto mínimo, suficiente para ponerse de acuerdo en las comidas. Sin la típica protección familiar, sin su compañía diaria, sin las divertidas charlas durante la comida hablando del telediario ni las broncas por no poner la mesa. También lejos de mis amigos, sin posibilidad de verlos en una urgencia determinada, con un apenas efectivo contacto ya ni siquiera diario. No hay nadie con el que charlar, nadie a quien comentarle nada, ni cómo está el tiempo, ni qué piensa de la catedral de Sevilla, o simplemente qué guapos que son los universitarios. Vivo asistiendo a unas clases como un ente cualquiera, indeterminado, uno más de la manada. Soy un individuo de tantos, que va a ocupar un asiento cualquiera en una de las muchas clases de cierta de las enormes facultades de la Universidad de Sevilla. En estos momentos, tan sólo soy un número, académicamente hablando. Y un viandante más de las 700.000 que hay en esta ciudad... tan sólo 10 veces más grande que Fuengirola, pero que te hace sentir 100 veces, o 1000, más pequeño.

Pero aún así, estoy bien. Estoy bien porque soy un actor extra, un simple figurante más que pasea entre la muchedumbre, pero por primera vez, y al mismo tiempo, soy el protagonista principal, el más importante, y sobre el que recae toda la acción. Para los demás, soy la hormiguita que va desde su colonia a buscar alimento, pero vuelve a las pocas horas. Pero para mí mismo, estoy en el centro de todo lo que ocurre. Es la primera vez en la que soy dueño de mis actos, y no me siento dirigido por lo que me pudieran decir mis padres, o mis amigos. Siento que estoy escribiendo mi propia historia. Que trazo palabra a palabra, frase a frase, párrafo a párrafo, iniciando el inmenso monólogo que desde ahora formará parte del gran libro, relato de mi vida. Volumen en el que se incluyen las experiencias, los sentimientos, los pensamientos y los conocimientos adquiridos a partir de todos ellos, y por último, siendo el mayor de los fines anhelados, la correcta aplicación de éstas técnicas para que la práctica de la vida resultase lo más "llevadera" posible. Pero no adelantemos acontecimientos, ni divaguemos sobre lo que aún no está escrito.

Estoy bien. Me siento libre. Estoy solo, muy solo, pero me siento con fuerzas. Todos aquellos fantasmas antes se presentaban demasiado vívidos. Llevo una semana aquí, y ni han dado señales de existencia. Es como si todo mi pasado se hubiera borrado. Al no haber nada ya anterior que me mortifique, y nada en esta nueva vida que me haga sentir mal, me encuentro en óptimas condiciones, que me habrían venido muy bien en otro momento. Pero lo pasado, pasado está, y hay que dejarlo allí. Así que no volveré a las penumbras del ayer a ver si sigue tan oscuro. Ésta es una oportunidad única para empezar desde cero, claramente, y reponer más fuerzas, aprovisionarme de más víveres, para la larga carrera (universitaria y vital) que aún me queda por delante. Podríamos decir que en estos instantes estoy parando en boxes. Desprendiéndome de la chatarra inservible y recogiendo el nuevo material a mi disposición.

O al menos, espero seguir con esa disposición mucho tiempo, y no volver a caer en la nefasta tentación del abandono al recuerdo.


Creo que ya me he extendido demasiado. Sepan disculpar que haya saltado de un derrotero a otro sin razón aparente. Pero es que en mi conciencia pesaba la desazón por tantas vueltas de manecilla en vano. Podríamos decir que esta ha sido una forma creativa de resarcirme, aunque quede insatisfecho con el resultado, literariamente hablando.

Y ahora, un regalito musical:





Doy las gracias a la persona que me regaló este pedazo de arte. Gracias por todo lo que me dió, cuando más lo necesitaba. Gracias por estar ahí tanto tiempo. Tranquilo, que tú no serás parte del desecho a olvidar. Sabes que siempre te tendré muy cerca.


David


lunes, 28 de septiembre de 2009

Mis aventuras en Hispalis

Buenas!

Estoy aprovechando un descanso en las clases, y que mi piso está cerca, para desayunar algo y escribir brevemente en este nuestro querido blog, y contaros cómo me van las cosas en esta lejana ciudad en la que por mano de la fortuna he llegado a caer.

Hoy he tenido mi primera clase. 2 horas, que serán a partir de ahora 4, de Análisis Gráfico Arquitectónico. Osea, dibujo artístico puro y duro. Le tenía bastante miedo, porque con un lápiz en la mano como mucho sé moverlo dando la sensación de que se dobla, ya sabéis, que ondula. Pero el profesor parece buena gente, intenta ser divertido y da la clase de forma amena, aunque nos ha asegurado que será muy muy estricto. Me gusta su manera de ver las cosas, aunque en la pedazo de charla de hoy, no me ha aportado nada nuevo. Que si para conocer, hay que observar. Que con la práctica se aprende. Que hay que ganarse las habichuelas para sacar buena nota en una asignatura de muchos créditos, 24. Lo que no me ha gustado nada nadísima de él es su comportamiento a veces. Las gracias que pretende realizar. Es horriblemente heterosexual. Para él, todos los chicos tienen que seguir a las gachís, y las chicas tienen que mirar a las gachós. Y de los otros, "bueno, allá ellos". No me gusta la gente demasiado heterosexual, que mantiene su condición por bandera, y establece esa "normalización".

Pero el resto, bastante bien. Ya me voy a ir yendo. A las 12 empieza otra clase, por lo visto ya común para todo el grupo A. Yo estoy en el A2. ¡Hay otro chico apellidado Blasco! Pero desgraciadamente, no hay gente muy interesante en mi clase. Nadie que me llame la atención. Por ahora me estoy acoplando con una versión más modesta de Aida, y un Luis Carlos divertido pero fácilmente controlable, y con chistes más coherentes. A ver cómo va la cosa.

Comienza mi vida sevillana.


David

martes, 22 de septiembre de 2009



Olé killo tu harte!!!

Pero ahora soy yo el que se va...

viernes, 18 de septiembre de 2009

"Ítaca", de K. Kavafis.

A David, Lírika, Robles y Sami, que empiezan en unos días un nuevo tramo de su camino.


Cuando emprendas tu viaje a Itaca
pide que el camino sea largo,
lleno de aventuras, lleno de experiencias.
No temas a los lestrigones ni a los cíclopes
ni al colérico Poseidón,
seres tales jamás hallarás en tu camino,
si tu pensar es elevado, si selecta
es la emoción que toca tu espíritu y tu cuerpo.
Ni a los lestrigones ni a los cíclopes
ni al salvaje Poseidón encontrarás,
si no los llevas dentro de tu alma,
si no los yergue tu alma ante ti.

Pide que el camino sea largo.
Que muchas sean las mañanas de verano
en que llegues -¡con qué placer y alegría!-
a puertos nunca vistos antes.
Detente en los emporios de Fenicia
y hazte con hermosas mercancías,
nácar y coral, ámbar y ébano
y toda suerte de perfumes sensuales,
cuantos más abundantes perfumes sensuales puedas.
Ve a muchas ciudades egipcias
a aprender, a aprender de sus sabios.

Ten siempre a Itaca en tu mente.
Llegar allí es tu destino.
Mas no apresures nunca el viaje.
Mejor que dure muchos años
y atracar, viejo ya, en la isla,
enriquecido de cuanto ganaste en el camino
sin aguantar a que Itaca te enriquezca.

Itaca te brindó tan hermoso viaje.
Sin ella no habrías emprendido el camino.
Pero no tiene ya nada que darte.

Aunque la halles pobre, Itaca no te ha engañado.
Así, sabio como te has vuelto, con tanta experiencia,
entenderás ya qué significan las Itacas.


martes, 15 de septiembre de 2009

Yann Tiersen - Les Jours Tristes




(Es mejor la letra original que la traducción)


It's hard, hard not to sit on your hands
And bury your head in the sand.
Hard not to make other plans
and claim that you've done all you can all along.
And life must go on.
···
It's hard, hard to stand up for what's right
And bring home the bacon each night.
Hard not to break down and cry
When every idea that you've tried has been wrong
But you must carry on.
···
It's hard but you know it's worth the fight
'cause you know you've got the truth on your side
When the accusations fly, hold tight,
Don't be afraid of what they'll say.
Who cares what cowards think, anyway.
They will understand one day, one day.
···
It's hard, hard when you're here all alone
And everyone else has gone home.
Harder to know right from wrong
When all objectivity's gone
And it's gone
But you still carry on
···
'cause you, you are the only one left
And you've got to clean up this mess
You know you'll end up like the rest,
Bitter and twisted, unless
You stay strong and you carry on.
···
It's hard but you know it's worth the fight
'cause you know you've got the truth on your side
When the accusations fly, hold tight,
Don't be afraid of what they'll say.
Who cares what cowards think, anyway.
They will understand one day, one day.
···
It's hard but you know it's worth the fight
'cause you know you've got the truth on your side
When the accusations fly, hold tight
And don't be afraid of what they'll say.
Who cares what cowards think, anyway
They will understand one day, one day, one day.



¡¡¡POR DIOS, CÁSATE CONMIGO, YANN TIERSEN!!!
David

lunes, 14 de septiembre de 2009

Venga, ya, tranquilos, el peligro pasó.

El blog está buenito.

Podéis hacer click en todos los enlaces que queráis... menos en el de la viagra. A no ser que de veras lo necesites. Pero... te digo yo que hay vías mejores.

¡¡¡En fin, que sigan escribiendo todos, que vuelva a la bulliciosa vida este blog!!! (Bueno, vale, sólo estamos Patricia y yo...)

David

domingo, 13 de septiembre de 2009

VIAGRA FROM CANADA PHARMACY




¡¡¡NO HAGÁIS CLICK EN NINGÚN ENLACE!!!









Dr.Chasity
Ca id nada Pharmacy guar vl antees you the low ajb est price on all of your med da ication(s). If you find your medication(s) cheaper at any other online Canad kgr ian pharmacy, we will price m rgc atch with them. Canada Pha xp rmacy will meet the pri gd ces of any accr nmt edited online mail order ph yq armacies that are Pharma zmw cy Che kf cker and CIPA app nw roved. frd34wu
Can ekx ada Pharmacy is hap mfs py to be of service to our cust cgw omers, at any time that we are ne zw eded. We are open for your co rn nvenience 24 hours a day, 7 days a we hx ek, 365 days a year. If you need to pla myj ce an order, inquire about our ord hq ering proce ie ss or obtain a price quote, our pat cgd ient care spec yz ialists are availa cd ble and hap ub py to help you.

Click here for more information!

Take p nfy art in all the lat py est topics of discu wc ssion in the forum. Sh mz are your advice, opi lru nions, questi dp ons, and work with other re pzt aders.








Señoras y señores, veo que tenemos SPAM en el blog xD xD xD
Está todo lleno de borradores como estos... intentaré solucionarlo, a ver qué carajo ha pasado.

Y ya que estamos.... dejemos al mítico, inigualable y genial inicio de esa palabra tan temida:



O quizás sea que en estos dos días me haya perdido yo algo, y alguien necesite con urgencia incrementar el tamaño de sus... atributos. He copiado uno para que lo veáis. Tan sólo es una curiosidad xD
David

uif7e2y3 -www.